Iglesia Catedral de Quilmes

“El Espíritu del Señor está sobre mí” (Lc 4,18)

Hermanas y hermanos:

En la lectura del libro Isaías y en el Evangelio según san Lucas, hemos escuchado: “El Espíritu del Señor está sobre mí” (Is. 61, 1; Lc. 4, 18) En el principio está el Espíritu del Señor.

“Cada uno de nosotros puede decir esto; y no es presunción, es una realidad, pues todo cristiano, especialmente todo sacerdote, puede hacer suyas las siguientes palabras: «porque el Señor me ha ungido» (Is 61,1). Hermanos, sin méritos, por pura gracia hemos recibido una unción que nos ha hecho padres y pastores en el Pueblo santo de Dios. Consideremos, pues, este aspecto del Espíritu: la unción” (Francisco, Misa Crismal del 2023) El Crisma, los óleos de los catecúmenos y de los enfermos que serán consagrados hoy, nos hablan de esta realidad que somos, mujeres y hombres, ungidos por el Espíritu.

Reunidos en esta Catedral, acompañados de nuestro predecesor, el P. Obispo Luis Stöckler, del querido Padre Obispo Juan Carlos, junto con el Padre Obispo Eduardo queremos celebrar con ustedes, queridos sacerdotes y diáconos, religiosas y religiosos, y todos los fieles presentes de los tres partidos, el gran amor de Dios manifestado en Cristo Jesús: el Ungido del Padre.

Hoy, junto a nuestro pueblo, diáconos y sacerdotes queremos renovar nuestras promesas ministeriales, así como en la Vigilia Pascual todos renovaremos las promesas de nuestro Bautismo. Delante de ustedes, hermanas y hermanos, queremos manifestar que “hemos creído en el amor que Dios nos tiene” (1 Jn. 4, 16) y que, de nuestra parte, sólo podemos decir: “Señor, tu lo sabes todo, sabes que te quiero” (Jn. 21, 17)

Algunas consideraciones que pueden ayudarnos a contemplar el gran regalo que Dios nos hace.

Primero, el diácono, el sacerdote, el obispo somos signos de un Dios que es amor. “Como el Padre me amó, también yo los he amado a ustedes, Permanezcan en mi amor” (Jn. 15, 9) Esta es nuestra experiencia más bella y profunda sentirnos amados, escogidos, consagrados y enviados por Él. “Como el Padre me envió a mí, yo también los envío a ustedes” (Jn. 20, 21) “No son ustedes los que me eligieron a mí, sino yo el que los eligió a ustedes, y los destiné para que vayan y den fruto, y ese fruto sea duradero” (Jn. 15, 16) Esta experiencia del amor de Cristo, renovada cada día, conserva la frescura y el ardor de nuestro sacerdocio, de nuestro diaconado.

Segundo, somos llamados a ser pastores y servidores de nuestro pueblo. Para eso hemos sido ordenados. Cristo es el don del Padre para la vida del mundo. “Yo soy el buen Pastor. El buen Pastor da la vida por las ovejas” (Jn. 10, 11) Como Cristo –pastor, servidor, esposo- ofrecemos nuestra vida por la salvación del mundo. En el corazón de nuestra espiritualidad está la caridad pastoral, hecha de profundidad contemplativa, de serenidad de cruz pascual, de generosa disponibilidad para el servicio. Dice el apóstol Pablo: “Nosotros no somos más que servidores de ustedes por amor de Jesús” (2 Cor. 4, 5) A ustedes, hermanas y hermanos, les pedimos que recen siempre para que el Señor aumente en nosotros la caridad pastoral.

Por último, sacerdotes y diáconos somos constructores de comunión. Somos los elegidos de Dios y consagrados por el Orden para ser constructores de la comunidad eclesial; en comunión profunda con el Obispo, con el presbiterio, con los demás diáconos, con las religiosas y religiosos y con los fieles laicos. Nuestra vida y ministerio están al servicio de la comunión eclesial, por medio de la Palabra, la Eucaristía y la caridad pastoral. La comunión exige una gran capacidad de donación, hecha con humildad de servidor y con alegría de amor fraterno. Como dice Juan: “Queridos míos, amémonos los unos a los otros, porque el amor procede de Dios, y el que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios. El que no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor” (1 Jn. 4, 7-8) (Cfr. Cardenal Pironio, homilía del 22 de junio de 1995)

“El Espíritu del Señor está sobre mí, porque el Señor me ha ungido. Él me envió” —continúa la profecía—, «y me envió a llevar una buena nueva, liberación, curación y gracia» (cf. Is 61,1-2; Lc 4,18-19); en una palabra, a llevar armonía donde no la hay. Porque como dice san Basilio: “El Espíritu es armonía”, es Él el que crea la armonía. Esta es una consideración que el Papa Francisco hacía en la Misa Crismal del año pasado. “Crear armonía es lo que Él desea, especialmente a través de aquellos en quienes ha derramado su unción”. “Ayudémonos, hermanos, a custodiar la armonía, custodiar la armonía —esta es la tarea—, empezando no por los demás, sino por uno mismo; preguntándonos: mis palabras, mis comentarios, lo que digo y escribo, ¿tienen el sello del Espíritu o el del mundo?»

Queridos sacerdotes, gracias por el sí de cada uno, por la entrega de cada día, por el servicio a sus comunidades y a la Iglesia de Quilmes. Son también los sentimientos del Padre Obispo Eduardo. En ustedes agradezco a aquellos que no están presentes, pero sí los tenemos en nuestro corazón unidos a esta Eucaristía. Vaya el recuerdo agradecido de los sacerdotes que nos han precedido en el encuentro definitivo con Dios, y que recordaremos en el momento de los difuntos.

Nuestro agradecimiento a los diáconos, a sus esposas y familias. Gracias por el testimonio de servicio generoso en sus destinos pastorales. Tenemos en cuenta a aquellos que están enfermos o imposibilitados de participar en esta celebración, que expresa la comunión de todo el pueblo cristiano junto a su Pastor.

Hermanas y hermanos: Rezaremos por nuestros diáconos y sacerdotes, como se hace en todas las Catedrales del mundo en la Misa Crismal. Recemos también por nuestros seminaristas, por los que se forman en el Instituto Diaconal, y por el aumento de las vocaciones.

Oremos también por todo nuestro pueblo que vive momentos de crisis social y política, de incertidumbre, de inseguridad, de empobrecimiento, de ataque sistemático a los valores culturales de la solidaridad y justicia social, para que nada ni nadie nos aleje de los grandes cauces de nuestra Iglesia diocesana de Quilmes: la opción preferencial por los pobres, el ardor misionero, la defensa de los derechos humanos y la fraternidad ecuménica.

Que María Inmaculada nos acompañe a vivir con alegría nuestra vocación de servicio al pueblo de Dios, consagrados para testimoniar el amor de Dios y ser factores de comunión fraterna.

+ Carlos José Tissera
Obispo de Quilmes

Quilmes, 27 de marzo  de 2024

Este lunes 25 de marzo celebramos el 40º aniversario de la ordenación del primer grupo de diáconos egresados de la Escuela de Ministerios de la Diócesis de Quilmes, ocurrida en 1984 en la Iglesia Catedral.

De una manera especial nos unimos a la acción de gracias por Jorge Laszuk de la parroquia San Juan Bautista, integrante de este primer grupo de diáconos, y rezamos por sus compañeros fallecidos: Juan B. Cucci, Alfio Fattori, Enrique M. Lombán, Prudencio Pío Romero, Sixto J. A. Silvero y Luis J. E. Timossi.

El sábado 06 de abril a las 18.00 h se hará una celebración de acción de gracias en la Capilla San Pedro Apóstol (Juárez Celman y Finochieto, Florencio Varela), perteneciente a la parroquia San Martín de Porres, donde el diácono permanente Jorge Laszuk sirvió durante 21 años.

A continuación, compartimos la tarjeta de invitación de estas históricas ordenaciones en la Diócesis de Quilmes.


Parroquia “San Juan Bautista” – Florencio Varela
“Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia”

Hermanas y hermanos:

Estamos participando de la Misa con la que iniciamos la Semana Santa. Al comenzar, conmemoramos la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, días antes de su muerte y resurrección. Entrada que está llena de contrastes. La ciudad está llena de gente venida de todas partes para celebrar la Pascua de los judíos. Esta celebración despertaba cada año ese sueño de la venida de un mesías nacionalista que con poder los liberara del poder opresor. Así es que reciben a Jesús con todos los honores y desbordantes de alegría cantan: “¡Hosana! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Bendito que ya viene el Reino de nuestro padre David! ¡Hosana en las alturas!”

Parece que Jesús acepta estos homenajes, pero hay manifestaciones suyas despegándose de ese mesianismo. Él ha enviado al pueblo a sus discípulos a buscar un asno. Da precisiones: “un asno atado cerca de una puerta, en la calle”. No hace como los reyes de entonces que montaban a caballo, con aire de conquistador, como jefe de un ejército triunfador luego de dar muerte a los enemigos. Todo lo contrario, el asno en esos tiempos era signo de vida. Era el animal compañero del hombre en su trabajo, vivía en la misma casa de su amo y lo ayudaba en sus tareas. Era su transporte para los viajes. El “asno atado y que nadie ha montado” es un signo de verdadera novedad. Jesús viene con una misión. Hasta entonces ningún jefe en Israel había entrado en la ciudad de Jerusalén como Jesús. Nadie había hecho la opción de hacer el camino de la humildad y de servicio a la vida, como Jesús que va a ofrecer su vida por el pueblo. Las autoridades religiosas sólo conocían el camino del interés, del poder, de las vanaglorias de los honores, de la explotación y de la violencia. El pueblo quería algo así, un rey o mesías poderoso. Cuando se dan cuenta que Jesús tiene otro proyecto distinto, lo rechazan y abandonan. Se dejarán engañar y muy pronto, al mismo que aclamaron como liberador estarán pidiendo al poder romano que lo crucifique. Será tratado como un delincuente y llevado a morir fuera de la ciudad, colgado en la cruz como un esclavo. No van a creer, salvo algunos, que esa era la máxima manifestación del amor, una vida entregada para que todo el mundo tenga vida, y vida en abundancia.

Comenzamos la Semana Santa. Las celebraciones de estos días, particularmente las del Triduo Pascual, son ocasión para que cada uno de nosotros renovemos nuestra vida de fe, contemplando el gran misterio de amor manifestado en Jesús muerto y resucitado. Es el núcleo vital de nuestra fe. Esto es lo que celebramos en cada Eucaristía, en cada Misa y de modo especial, el domingo. A todos los fieles cristianos de la diócesis los invito, en la medida de sus posibilidades, a participar de las celebraciones que se han organizado en las parroquias y capillas. Participemos en familia. Necesitamos todos unirnos como pueblo cristiano a celebrar y expresar nuestra fe. Los momentos difíciles que vive la Patria y el mundo entero requiere que fortalezcamos nuestro espíritu. No nos dejemos llevar por el odio, la desesperanza, el inmovilismo del individualismo que nos tienta a pensar y decir: que cada uno se las arregle: sálvese quien pueda. Jesús nos ha salvado, pero nadie se salva solo. Es la hora de la solidaridad, de la lucha por la justicia que es el camino de la paz. La hora de hacernos prójimo, mirando al costado del camino y socorrer al que necesita ayuda y consuelo. Atrevámonos a transitar la senda de la ternura para vencer la insensibilidad, el cinismo y la crueldad, tan en boga en muchos discursos y conversaciones. Ese es el camino del bien, de la verdad, de la justicia y la paz. No es el camino de los poderosos y comerciantes de la muerte.

Sepamos estar junto a las víctimas de la injusticia, de la ambición, de la prepotencia y soberbia de aquellos que sólo buscan servir al dios dinero y no tienen en cuenta el bien común de la sociedad. 

Este domingo de Ramos coincide con una fecha que ya ocupa un lugar en nuestra historia argentina, es el “Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia”, conmemorando el trágico golpe de Estado del 24 de marzo de 1976. Fueron años de oscuridad, dolor y muerte para los argentinos. El miedo cundió en la sociedad como pocas veces en los doscientos años de la vida de la Patria. Del seno de la Iglesia nacieron voces proféticas, como también de otros sectores de la sociedad. Fueron luces en medio de las tinieblas. Nuestra Diócesis de Quilmes fue creada en ese mismo año, y tuvo como primer pastor al Padre Obispo Jorge Novak, quien recibiera la ordenación episcopal en nuestra Catedral el 19 de septiembre de 1976. Ya en los primeros días de su ministerio empezaron a golpear a su puerta aquellas personas que nadie quería recibir ni escuchar: los familiares de las personas detenidas y muchas desaparecidas hasta el día de hoy. Hay cientos de testimonios escritos del accionar de nuestro obispo junto a esas familias, buscando saber algo de sus hijos e hijas. Esa actitud no era la de la mayoría de los dirigentes, más bien, muy pocos fueron los que se comprometieron a riesgo de sus propias vidas. 

He traído para tener en este altar hoy, una carta del Padre Obispo Jorge dirigida a los detenidos a disposición del Poder Ejecutivo Nacional, respondiendo a cartas que los presos le habían hecho llegar. Es un saludo que les hace con motivo del comienzo de la Semana Santa, fechada el 12 de abril de 1981. Leeré algunos párrafos.

“Queridos hermanos:

En la imposibilidad de escribirles a cada uno de ustedes, extendiéndome como quisiera en consideraciones que fueran respuesta a las inquietudes expresadas en sus cartas, les hago este saludo, que ojalá les llegue para la Pascua.

Ustedes me agradecen la preocupación que les he exteriorizado en mi acción pastoral como obispo de esta diócesis de Quilmes. Al respecto, hay que tener presente que todo Obispo es ordenado, en primer lugar, para demostrar inequívocamente una actitud de paternal afecto hacia los necesitados…

Que estas líneas que les escribo a una semana de la Pascua, interpreten mis deseos de que ustedes gocen de salud, de la visita de sus seres queridos y de un trato acorde a su condición de hijos de Dios y hermanos nuestros por la fe en el Señor Jesucristo…

El criterio que me guía es el del Apóstol Pablo que escribió: “¿Quién es débil, sin que yo me sienta débil? ¿Quién está a punto de caer, sin que yo me sienta sobre ascuas? (1 Cor. 11, 29) …. 

Siempre que me otorguen el permiso las autoridades responsables, los visitaré personalmente. Porque no se me borran del corazón las graves sentencias de Jesús: ´Estaba preso, y me vinieron a ver´ (Mt. 25, 36), en base a lo cual como a las otras correlativas, seremos juzgados todos, sin excepción alguna.

Nada mejor para concluir esta carta pascual que una fórmula que nos llega de la primera comunidad cristiana (2 Cor. 13, 11-13)

´Finalmente, hermanos, estén alegres, trabajen para ser perfectos, anímense, tengan un mismo sentir y vivan en paz. Y el Dios del amor y de la paz estará con ustedes. Salúdense mutuamente con el beso santo. Todos los hermanos les envían saludos. La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo permanezcan con todos ustedes.

Afmo. 
+ J.N.

Quilmes, 12 de abril de 1981, comienzo de la Semana Santa”



Hermanas y hermanos, es un verdadero regalo que tengamos tan cerca de nuestro corazón el testimonio de este Siervo de Dios, que muchos han conocido y que tantas veces celebró la Eucaristía en este templo principal de Florencio Varela. Él vivió su seguimiento de Jesús en un momento preciso de la historia de nuestro pueblo argentino. Hoy nosotros, a más de cuarenta años, en otro siglo, somos protagonistas de otro momento histórico.

Comencemos esta Semana Santa con los ojos fijos en Jesús. Nos preguntamos: ¿cuáles serán mis actitudes en estos días? Como sugerencia, diría:

– Imitar el silencio y la humildad de Jesús, como hoy lo presenta la Palabra que escuchamos. ¿Cómo puedo hacer este silencio? ¿En qué situaciones podré vivir esa humildad? ¿En qué momentos puedo estar a solas y comunitariamente con Jesús?   
– Contemplando el mayor servicio de Jesús, al entregar su propia vida por amor a mí ¿Cuáles serán mis decisiones para servir mejor a los demás? En este momento de nuestra vida ¿cómo puedo ser reflejo del amor de Jesús? ¿Qué veo a mi alrededor? ¿Agradezco las muestras de amor hacia mi persona? ¿Cómo retribuyo a Dios y a los demás lo que recibo cada día? Ante la crisis alimentaria que vivimos ¿sé compartir con los más necesitados lo que tengo y puedo dar? 
– Mirando a Jesús que también me mira, me animo a dejar que Él me pregunte ¿qué puedo hacer por ti? ¿Qué le pediría en estos días a Jesús que me muestra su corazón traspasado?
 
Que María nos conceda tener también sus sentimientos de Madre para estar con Jesús, para estar de pie junto a los crucificados de hoy. Que San Juan Bautista nos conceda ser profetas de este Reino de justicia, de amor y de paz que Jesús inauguró para siempre en su misterio pascual.

+ Carlos José Tissera
Obispo de Quilmes

Florencio Varela, 24 de marzo  de 2024

Próximos a vivir la Semana Santa compartimos las celebraciones que presidirán el Obispo de Quilmes, Carlos José Tissera, y el Obispo Auxiliar de Quilmes, Eduardo Gonzalo Redondo.

A continuación el detalle de los días y celebraciones de esta semana central para los cristianos:

Domingo de Ramos (24 de marzo)

09.00 h. Iglesia Catedral (Rivadavia 355, Quilmes)
P. Obispo Redondo

10.00 h. San Juan Bautista (25 de mayo 611, Florencio Varela)
P. Obispo Tissera

19.00 h. Iglesia Catedral (Rivadavia 355, Quilmes)
P. Obispo Tissera

19.00 h. Nuestra Señora de Luján (Calle 24 esq. calle 148, Villa España)
P. Obispo Redondo

Misa Crismal (Miércoles 27 de marzo)

19.00 h. Misa Crismal en Iglesia Catedral (Rivadavia 355, Quilmes)
P. Obispos Tissera y Redondo

Jueves Santo (28 de marzo)

09.00 h. Misa y lavatorio de los pies en el Complejo Penitenciario de Florencio Varela
P. Obispos Tissera y Redondo

19.00 h. Misa de la Última Cena y lavatorio de los pies en Nuestra Señora de Itatí (Mons. Enrique Angelelli 2226, Barrio La Paz, Quilmes Oeste)
P. Obispo Redondo

19.00 h. Misa de la Última Cena y lavatorio de los pies en la Iglesia Catedral (Rivadavia 355, Quilmes)
P. Obispo Tissera

Viernes Santo (29 de marzo)

10.00 h. Celebración de la Pasión y Vía Crucis en Nuestra Señora de Czestochowa (Santa Cruz 710, Ezpeleta)
P. Obispo Tissera

15.00 h. Celebración de la Pasión y Vía Crucis en Iglesia Catedral (Rivadavia 355, Quilmes)
P. Obispo Redondo

16.00 h. Celebración de la Pasión y Vía Crucis en Nuestra Señora del Huerto (Calle 898 esq. calle 863, Barrio Los Eucaliptus, San Francisco Solano)
P. Obispo Tissera

20.00 h. Celebración de la Pasión y Vía Crucis en San Cayetano (El Zonda y El Atalaya km. 26, Florencio Varela)
P. Obispo Tissera

Sábado Santo (30 de marzo)

19.00 h. Vigilia Pascual en Iglesia Catedral (Rivadavia 355, Quilmes)
P. Obispo Redondo

20.00 h. Vigilia Pascual en Sagrada Familia (Calle 148 Nº 1351, Berazategui)
P. Obispo Tissera

Domingo de Pascua (31 de marzo)

09.00 h. Misa en Iglesia Catedral (Rivadavia 355, Quilmes)
P. Obispo Tissera

10.00 h. Misa en San Francisco Solano (Calle 844 Nº 2155, San Francisco Solano)
P. Obispo Redondo

17.00 h. Misa en Hogares Madre Teresa (Berazategui)
P. Obispo Redondo

19.00 h: Misa 50° aniversario del Movimiento de la Palabra en Nuestra Señora de la Guardia (Belgrano 230, Bernal)
P. Obispo Tissera

El Padre Obispo Carlos José Tissera oficializó el viernes 22 de marzo la conformación de la Comisión Diocesana de Ecumenismo, Diálogo Interreligioso y otras Religiones.

Designaciones para esta comisión de la Diócesis de Quilmes:

Asesor:
Presbítero Marcelo Martín Pedraglio

Coordinadora:
Mónica Mariel Gangemi

Miembros:
Sebastián Ramón Arriola
Andrea Laura Guillade
Gastón Omar López Lebrero
Agustina Haydée Villar

“¿Dónde está tu hermano, dónde está tu hermana?”
(cf. Gén 4,9)

24 de Marzo de 2024, domingo de Ramos para la fe cristiana. Han pasado 48 años del último golpe cívico-militar. En unidad con todos los organismos de Derechos Humanos y, desde nuestra rica historia Diocesana en Quilmes, levantamos nuestros ramos pidiendo al Dios de Jesús que reine en nuestra historia con más Memoria, Verdad y Justicia.

Especialmente cuando, desde el Gobierno Nacional, se ironiza con el símbolo de “los/as 30.000” negando aquel plan sistemático del terrorismo de estado; cuando se vacían las políticas de derechos humanos y se vuelve a dar injerencia a las fuerzas armadas en asuntos de seguridad interior; cuando las políticas económicas nos recuerdan los peores momentos del empobrecimiento de nuestra Patria; cuando se derogan leyes que limitan la extranjerización de la tierra y se ofrecen nuestros recursos naturales al mejor postor; cuando los salarios de trabajadores y trabajadoras, la salud, las jubilaciones, la educación, la investigación científica se miran como “gastos” o “salidas” en una planilla contable y no como inversión en humanidad, en futuro, en grandeza de la Patria. 

Somos de aquellos y aquellas que creen en la justicia social como un horizonte para diagramar programas y proyectos desde donde soñar nuestra convivencia.

¿No estamos frente a un nuevo “plan sistemático”? 

Con nuestra hermana Diócesis de Merlo-Moreno creemos que “no basta con la legitimidad de origen”, sino que “el ejercicio del poder debe llevarnos a la construcción de sociedades más justas y más humanas” (Carta al Pueblo de Dios de Merlo-Moreno, 10/03/24, tomado de las palabras del Papa Francisco). Las medidas de este gobierno, a 100 días de su asunción, han hecho añicos la realidad de miles de familias, ha puesto en jaque la integración de la Nación.

Poner en duda las políticas de derechos humanos, negar a los desaparecidos y desaparecidas, erigir a condenados por delitos de lesa humanidad como patriotas, dar la espalda a las familias más pobres para satisfacer la avaricia de los ricos, destruir la industria nacional, proponer una economía entreguista se parece mucho a aquel nefasto “Proceso” comenzado en 1976. Se parece mucho a la entrega de los años 90 que supo parir aquel dolor social de 2001.

Debajo de las palabras y los discursos de ocasión, hoy como ayer, quedan en evidencia los hechos que revelan la realidad: multitud de pobres cada vez más pobres, más desigualdad, más violencia, más individualismo, menos Patria. ¿Podremos responderle a Dios por el paradero de nuestros hermanos y hermanas?

Junto a las Madres y a las Abuelas, comenzamos una nueva Semana Santa marchando por Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo al encuentro del Dios de la Vida.

Departamento de Pastoral Social
Departamento de Justicia y Paz
Vicaría de la Solidaridad

Diócesis de Quilmes

 Quilmes, 24 de marzo  de 2024

El próximo sábado 16 de marzo entre las 10 y las 17 h celebraremos el Encuentro Festivo Diocesano en la Casa de Encuentros Santo Cura Brochero (Pergamino 1401, Bosques), con el lema «En tiempos difíciles celebramos la fe con el Cura Brochero y Mama Antula»

Compartimos el video con la invitación del Padre Obispo Carlos José Tissera a celebrar a Santo Cura Brochero en su día, el mismo 16 de marzo, y a Santa Mama Antula, cuya fiesta fue el 7 de marzo.

Se invita a llevara comida a la canasta.

Queridos hermanos y hermanas: 

Como todos los años, nos reunimos a celebrar nuestra fe en torno a la fiesta del Santo Cura Brochero, que tanta devoción despierta en nuestras comunidades. Este año «ensanchamos la carpa» de la fiesta con el regalo de Mama Antula, primera santa argentina.

Santa María Antonia de San José, como el Santo Cura Brochero, con su testimonio nos anima a seguir a Jesús, comprometiéndonos en la oración y en la misión, partiendo siempre de los «últimos»: los pobres, los «rotos», los que están tirados al costado del camino. Su valentía y coraje, en tiempos difíciles, nos inspiran a ser creativos en nuestro servicio a los hermanos.

La memoria de ellos nos lleva a las raíces profundas de nuestra patria, de nuestra Iglesia y de nuestra fe. Estas santas devociones en nuestra diócesis de Quilmes nos la regalaron el Padre Obispo Jorge Novak y el Padre Gino hace más de cuarenta años, impulsando experiencias de evangelización y misión.

Como nos enseña el Papa Francisco, una fe que no tiene memoria y no tiene raíces se seca y muere. Por ello queremos alimentar nuestra fe como pueblo peregrino en nuestra diócesis compartiendo un Encuentro Festivo Diocesano el próximo sábado 16 de marzo desde la 10 hasta las 17 h en la Casa de Encuentros Santo Cura Brochero (Pergamino 1401, Bosques). Celebraremos la misa a las 11 h, compartiremos el almuerzo a la canasta y luego tendremos, durante la tarde, fiesta y baile popular. No se olviden de traer mate y tereré.

Porque, ¡en tiempos difíciles no podemos dejar de celebrar la vida y la fe! 


+ Carlos José Tissera
Obispo de Quilmes

+ Eduardo Gonzalo Redondo
Obispo auxiliar de Quilmes

 Quilmes, 28 de febrero de 2024

Compartimos la invitación del Padre Armando Ireneo Dessy, capellán de la Fazenda de la Esperanza, Párroco Emérito y Director Pastoral de Nuestra Señora de la Esperanza de Florencio Varela y Canciller de la Diócesis, y de Ricardo Martín Tissera, vicepresidente y responsable de la Fazenda, con la invitación al 13º aniversario de la Fazenda de la Esperanza “San Lorenzo”, centro de recuperación de adicciones de la Diócesis de Quilmes.

A los amigos y colaboradores
de la Fazenda de la Esperanza “SAN LORENZO”
Presente 
.    

De nuestra consideración:

Tenemos el agrado de saludarlos en nuestro carácter de responsables de la Fazenda de la Esperanza “San Lorenzo” de cuya existencia y actividades como Centro de recuperación de adicciones -a partir de su inauguración el 13 de marzo de 2011-  hemos brindado a Ustedes información en más de una oportunidad.

El motivo de la presente es invitarlos a la celebración del décimo tercer aniversario de la misma, ubicada en la calle Bruselas 2040 del Barrio Santa Rosa. Ello será, Dios mediante, el Domingo 10 de marzo a las 12 hs. con la Misa a celebrarse en la Capilla “San Lucas Evangelista. Recordaremos aquel momento en el cual el ahora Obispo Emérito Luis Teodorico Stöckler la inauguró el citado 13 de marzo de 2011, acompañado en ese día por los Fundadores: Fray Hans Stapel y Nelson Giovanelli. Ellos son quienes dieron origen en Brasil el 29/06/1983 (hace más de cuarenta años) a la “Familia de la Esperanza”, que cuenta en estos momentos con más de cien “Fazendas” o Centro de Recuperación de Adicciones en más de quince países. 

La nuestra, de Florencio Varela, es la quinta de la docena de Fazendas existentes en este momento en Argentina. Fue la primera en la Provincia de Buenos Aires y es la única en el Gran Buenos Aires.

Agradeciendo desde ya la posible participación de Ustedes y la difusión que puedan brindar a nuestra información, los esperamos el domingo 10/3 y los saludamos muy atentamente.

Padre Armando Ireneo Dessy
Presidente – Capellán de la Fazenda de la Esperanza
Párroco Emérito y Director Pastoral de Nuestra Señora de la Esperanza

Roberto Martín Tissera
Vicepresidente – Responsable de la Fazenda

Florencio Varela, 07 de marzo de 2024.

La Diócesis de Quilmes se prepara para la décima primera Peregrinación Brocheriana a Pie que se realizará el domingo 10 de marzo, con el lema «Cada uno toca la cuerda con los dedos que Dios le ha dado»

La caminata iniciará en la Catedral de Quilmes (Rivadavia 355, Quilmes Centro) a las 7.30 de la mañana, y culminará en la Casa “Santo Cura Brochero” (Trenque Lauquen 2551, Bosques), donde se celebrará la misa después del mediodía, cuando lleguen los peregrinos.

La Peregrinación constará con tres paradas antes de llegar a destino: alrededor de las 9.00 en el Parque de la Ciudad “Jorge Novak” (Av. Smith y Vicente López, Quilmes), cerca de las 10.30 en la Parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro (Av. Calchaquí 4949, Quilmes Oeste), y a las 12.00 en la Plaza del Mate (Ruta 36 y Thevenet, Florencio Varela). Quien no desee hacer el recorrido completo podrá sumarse en alguno de estos puntos.

Toda la comunidad diocesana está invitada a participar de esta manifestación de fe.

La imagen de María, Reina de las Misiones, visitará la Diócesis de Quilmes desde el sábado 17 hasta el sábado 24 de febrero. Esta peregrinación se da partir del compromiso asumido en el VI Congreso Misionero Nacional celebrado en San Luis el pasado octubre, para que la Virgen llegue a todas las diócesis del país. 

La imagen de María, Reina de las Misiones, inició su peregrinación el 15 de octubre en la Región Patagonia, y culminará en enero de 2025 en la Región del Noreste argentino. En su recorrido, en septiembre de 2024, estará en Paraná (Entre Rios) para celebrar el 25º aniversario del primer Congreso Americano Misionero (1999).

Con el propósito de que la visita de la Virgen sea un impulso a la misión e incentive a las diferentes comunidades a la evangelización, la diócesis de Quilmes tendrá la gracia de recibir a la Virgen María la próxima semana de febrero.

El itinerario de la imagen de la Virgen en la Diócesis de Quilmes:

Sábado 17 de febrero
Parroquia El Salvador (Calle 459 Nº 939, Gutiérrez)
13.00 Misión por el barrio y Misa.
Recorrido por el Parque Pereyra Iraola

Domingo 18 de febrero
Capilla Santa Catalina de Siena (Calle 129 y 57, Barrio Marítimo)
19.00 Misa

Lunes 19 de febrero
Clínica Nuestra Señora de Luján (Buenos Aires 50, Florencio Varela)
08.30 Visita a los pacientes

Estación de tren de Zeballos (Zeballos, Florencio Varela)
18.00 a 20.00 visita a la estación

Martes 20 de febrero
Capilla Nuestra Señora del Rosario 
(Alem y Parrillo, Florencio Varela)
La imagen estará durante la mañana

Hogar Refugio «Padre Obispo Jorge Novak» (Santiago del Estero 368, Zeballos)
18.00 Bendición de los internos

Parroquia San Pantaleón (Fray Santa María de Oro 1799 esq. Sarratea, Florencio Varela)
19.00 Celebración de la Palabra

Miércoles 21 de febrero
En parroquia San Pantaleón

18.00 Rosario Misionero y despedida

Jueves 22 de febrero
Parroquia San Jorge 
(Calle 517 Nº 3559, Florencio Varela)
09.00 Misión por el barrio

Capilla María Madre de los Humildes(Calle 540 e/ 515 y 517, Florencio Varela)
13.00 Almuerzo comunitario
15.00 Rosario misionero

Estación de tren de Ardigó(Ardigó, Florencio Varela)
17.00 Visita a la estación
19.00 Misa en la estación

Viernes 23 de febrero
Capilla San Roque
(Intendente Oliveri y Calle 390, Quilmes Oeste)
17.00 Llegada de la Virgen

Sábado 24 de febrero
Parroquia San Cayetano
(Mosconi 21, Quilmes Oeste)
11.00 despedida de la Diócesis para la visita a la diócesis de Lomas de Zamora

Pedimos a María Reina de las Misiones que fortalezca nuestra fe.